Datos personales

Caballito, Capital Federal, Buenos Aires, Argentina
Prof. Lic. en Psicología (UBA). M.N. 43.722 Atención psicológica, presencial y virtual. myanigro@gmail.com 0116688-1894

BIBLIOGRAFIA

viernes, 11 de septiembre de 2009

Perversiones: Inicio de la teorización Freudiana


Perversiones

Hay un movimiento en la obra de Freud desde 1905 hasta 1938 cuando escribe “la escisión del yo en el proceso defensivo”, donde va construyendo un concepto de perversión, como distinto del de neurosis, y en este recorrido hay por lo menos tres momentos:1) Un primer momento que es este de 1905 donde toda la pregunta freudiana gira en torno del concepto parcial y de la sexualidad perversa polimorfa y donde la perversión queda como déficit en relación a la neurosis.
2) Un segundo, “Pegan a un niño” (Freud) y “el problema económico del masoquismo” donde Freud se va a preguntar que relación tiene la pulsión no ya con la pulsión parcial, sino con la fantasía y el Edipo, aquí se va a enfatizar cada vez mas la cuestión del masoquismo.
Pero en estos dos momentos le quedan bastante pegados, en muchos puntos perversión y neurosis.
3) Recién en un tercer momento Freud va a deslindar la especificidad de la perversión (“Fetichismo” y “La escisión del yo…”), cuando logre situar si el mecanismo de la neurosis es la represión, la operación constitutiva de la perversión tiene que ser otro, que va a llamar “renegación”, pero en torno de un punto central que es el mismo: la castración materna.
En 1905 tiene que, primero construir el concepto de pulsión parcial y pensar la perversión como modo especifico en que esta pulsión parcial, esta sexualidad perversa y polimorfa se pueda poner en juego.
Las representaciones sobre la sexualidad son: en principio una distorsión que habría que poder resituar, y el primer criterio ordenador, que lo pone Freud, es esa doble vía de pensar las desviaciones en relación al objeto y en relación a la meta. Dice, llamamos objeto a la persona de la cual parte el atractivo sexual y meta a las acciones que se realizan con el objeto. Pero nos encontramos con que, aun en la sexualidad normal, hay muchas desviaciones en la meta, también al objeto, en tanto ideal; lo cual ya plantea un primer problema.
Si podemos pensar como desviaciones componentes congruentes que participar de la sexualidad de todo el mundo, es precisamente, porque esas metas de la unión en el coito con fines reproductivos con alguien del sexo opuesto, son ideales. Si hablamos de desvíos, hay que precisar desvío respecto de que. La sexualidad normal aparece como desviada en relación al objeto y la meta. Freud, acerca el campo de la perversión al campo de la sexualidad normal, con lo cual es problema ahora es diferenciarlos.
Otra pregunta que plantea es si las perversiones habría que pensarlas en relación a cierto carácter innato de componentes sexuales aberrantes. Freud dice que, de ninguna forma es concluyente pensar a las perversiones como innatas pero también seria un error pensar que son debidas a vivencias puramente contingentes. Para Freud la cuestión es bastante compleja, ya que sabemos que la sexualidad no es solo la pulsión, involucra otro componente que es la elección de objeto, el campo del Edipo.
Dice que puede haber por lo menos tres posibilidades en cuanto a los destinos de la sexualidad humana; o bien los componentes pulsionales perversos se exteriorizan en actos perversos; o bien experimentan una sofocación (represión) insuficiente y entonces se expresan con síntomas patológicos (los síntomas son la vida sexual de los enfermos); o bien se entregan por medio de una restricción eficaz a la sexualidad “normal”.
Separa perversión y neurosis, en que habría un déficit en relación a los diques anímicos (asco, vergüenza y moral).
Va a relativizar el hecho de que aun cuando aparezcan operaciones claramente aberrantes en relación a los diques anímicos, esto suponga un modo de funcionamiento enfermo en el conjunto de la personalidad de ese paciente.
La perversión también queda situada como déficit en relación a la síntesis pulsional bajo el primado de los genitales. La sexualidad “normal” incluye componentes que parecen fusionados en un todo pero que las perversiones nos muestran que en realidad son componentes separados. La síntesis de los componentes sexuales se produce en la pubertad, porque hay hallazgo de objeto y una nueva meta sexual que es el coito con fines reproductivos. En la pubertad se llegaría a la meta y al objeto ideal. Por un lado parece que la sexualidad es perversa y polimorfa, esta compuesta por elementos heterogéneos que se desvían de la meta y de los objetos ideales.
¿Entonces que hace de bisagra entre la neurosis y la perversión? En la neurosis las fijaciones se expresan en síntomas neuróticos, y en perversión, como actos perversos. Lo que las divide es la represión. Freud dirá “la neurosis es el negativo de la perversión”.

No hay comentarios:

Buscar este blog